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El rodaje de Pirates of the Caribbean: Dead Men Tell No Tales, la quinta entrega de la franquicia de Jerry Bruckheimer, se detuvo por causa de una lesión en la mano de Johnny Depp y después de unos días de ausencia, el productor ha anunciado el regreso de su estrella principal publicando en Twitter una fotografía de Jack Sparrow atrapado por sus enemigos.

“El capitán Jack está de vuelta y no le vamos a dejar marchar”, escribía Bruckheimer a modo de pie de foto, consiguiendo cientos de retuits y de clics en “me gusta”. La emoción de volver a ver a Depp vistiendo su traje de pirata reaviva las expectativas hacia la película.

El rodaje del film que dirigen Espen Sandberg y Joachim Ronning se está llevando a cabo en Australia, más concretamente en Queensland. La lesión que sufrió Depp en la mano obligó a trasladarlo a Gran Bretaña, donde se le implantó un clavo y se le recetaron cuatro semanas de reposo. Se preveía retomar la filmación el día 15 de abril, pero por lo que se ve, el actor se ha tomado una semana extra.

Javier Bardem se une a la saga en la que su pareja, Penélope Cruz, ya no intervendrá. El español interpreta al malvado Capitán Salazar, el enemigo que plantará cara a Sparrow al mando de una tropa de mortíferos piratas-fantasma que han escapado del Triángulo del Diablo.

Brenton Thwaites y Kaya Scodelario completan el reparto del film que tenía previsto su estreno para el 7 de julio de 2017 en EE. UU. Veremos más adelante si el retraso en el rodaje, además de provocar un fuerte descalabro económico, afectará a la fecha prevista para el lanzamiento de la superproducción

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